ZACATECAS. La Fiscalía de Justicia del estado de Zacatecas (FGJE) rechazó que exista impunidad en el caso de Rubén Ibarra Reyes, ex rector de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), y que la reparación del daño a la víctima deba ser considerado como un «pago negociado», como señalan algunas personas de título individual y colectivo, pues “revictimiza”.
En sus redes sociales, la FGJE publicó un posicionamiento para, ante las diversas manifestaciones por el caso realizadas en espacios públicos y redes sociales, precisar lo siguiente:
“El presente asunto no quedó impune, ya que cuenta con una sentencia condenatoria emitida por el Órgano Jurisdiccional competente, resolución judicial que implicó la reparación del daño, la cual a petición de la Fiscalía y por derecho de las víctimas, fue pertinente considerar un proyecto de vida en beneficio de la víctima”.
Por eso, agrega, que la reparación del daño “de ninguna manera debe ser considerado como un ‘pago negociado’, concepto que de manera irresponsable han señalado diversas personas a título personal y colectivo, situación que revictimiza por estigmatizarlas respecto al haber lucrado con el evento ocurrido”.
La Fiscalía sostiene que “la reparación del daño es un derecho de las víctimas, reconocido en nuestra Constitución y en tratados internacionales, el cual busca restituir la dignidad, bienestar, garantizar la no repetición del hecho delictivo y de manera importante, generar condiciones que impacten de manera benéfica en el proyecto de vida, buscando generar condiciones que coadyuven a restablecer los derechos y condiciones de pleno desarrollo a las víctimas”.
Aunque dice que respeta el derecho a la libertad de expresión, acceso a la información y a la libre manifestación de las ideas, la Fiscalía recuerda que “el límite es el respeto irrestricto a los derechos humanos como son la moral, la vida privada y los derechos de terceros, que en este caso son los derechos de las víctimas y particularmente de la niñez”.
En posicionamiento, finaliza: “Desde la Fiscalía hacemos un llamado para escuchar a nuestras infancias, tener empatía y conocer sus vivencias, así como fomentar la cultura de la denuncia con la finalidad de proteger a nuestras niñas y niños”.