WASHINGTON. El Presidente Donald Trump firmó ayer dos decretos que suavizan los aranceles que él mismo impuso a la industria automotriz de Estados Unidos, en los cuales ordena que las tarifas no sean acumulables y facilita exenciones por dos años a una mínima porción de autopartes importadas.
Bajo un sistema sumamente complejo, que aún está bajo estudio de expertos, Trump permitirá a las armadoras en Estados Unidos que paguen el arancel de 25 por ciento por autos importados, exentar uno adicional del mismo porcentaje al acero y aluminio, una medida que él mismo impuso.
«Les estoy dando un pequeño respiro, ¿ok?. Ellos están usando autopartes de todo el mundo. Y yo no quiero eso», dijo Trump ayer en un mitin en Detroit.
«Yo quiero que las fabriquen aquí. Pero les di… un poco de flexibilidad. Les dimos un poco de tiempo antes de asesinarlos si no hacen esto bien».
Con la intención de hacer que las compañías automotrices construyan plantas dentro de EU, el Presidente impuso el pasado 3 de abril un arancel de 25 por ciento para los autos importados, pero ofreció un trato particular para los fabricados en México y Canadá, sus socios dentro del tratado regional (T-MEC).
Según uno de los decretos anunciados ayer por Trump, se permitirá a las armadoras con plantas de ensamble final en EU, tener excepciones arancelarias por 15 por ciento del valor de sus autopartes durante el próximo año, algo que bajaría a 10 por ciento en un segundo año, y tras lo cual dichas exenciones desaparecerían.
Mediante un comunicado, la Casa Blanca hizo oficial la iniciativa del Presidente Donald Trump, y detalló además que el fabricante de automóviles también podrá solicitar un importe de compensación por ajuste a la importación igual al 3.75 por ciento del valor agregado del Precio de Venta Sugerido por el Fabricante (MSRP) de todos los automóviles ensamblados en EU desde el 3 de abril de 2025 hasta el 30 de abril de 2026.
Además podrá solicitar una cantidad de compensación de ajuste de importación igual al 2.5 por ciento del valor agregado MSRP de los automóviles fabricados desde el 1 de mayo de 2026 hasta el 30 de abril de 2027.
El Consejo Estadounidense de Política Automotriz, la asociación que representa a las tres grandes armadoras estadounidenses -General Motors, Ford y Stellantis- dio la bienvenida a las decisiones de Trump, pero aseguró que aún deben hacer un estudio de sus efectos.
«Revisaremos detenidamente los detalles de la orden ejecutiva para evaluar su eficacia para mitigar el impacto de los aranceles en los fabricantes de autos de EU, nuestras cadenas de suministro nacionales y, en última instancia, en los consumidores de EU», dijo el ex Gobernador de Missouri Matt Blunt, presidente de esta asociación.